La directora encargada de la Dirección de Promoción y Prevención del Ministerio de Salud, Claudia Cuéllar, afirmó que estos protocolos estarán direccionados por los accionistas, comerciantes, arrendatarios, trabajadores, usuarios, clientes, transportadores y el público en general que acude a trabajar en estos lugares o de compras.

“Estos espacios deben estar debidamente desinfectados, porque el objetivo es evitar la trasmisión del virus persona a persona”, manifestó.

Dijo que los administradores de las centrales de abastos y plazas de mercado, deben evitar la aglomeración de los trabajadores, los comerciantes, los proveedores, los clientes y los visitantes.

“Se deben adoptar restricciones de ingreso de acuerdo con el número de cédula, la modificación de horarios de funcionamiento, entre otras; pero también deben solicitar el acompañamiento de la Policía Nacional y las autoridades competentes para ejercer el control de las medidas establecidas”, subrayó.

Las autoridades de salud ratificaron que se debe existir una comunicación fluida con los administradores de las centrales de abasto y las plazas de mercados ante un eventual riesgo de contagio de coronavirus.

Dentro de las medidas se encuentran:

Prohibir las ventas ambulantes de alimentos, productos de tabaco y bebidas, así como el consumo y expendio de bebidas alcohólicas y tabaco al interior de las instalaciones. 

Incrementar las rutina de limpieza y desinfección en las unidades sanitarias y zonas de mayor tráfico de personas.

Prohibir el ingreso de menores de edad y adultos mayores de 70 años, siempre que no se encuentren dentro de las excepciones previstas por la Resolución 464 de 2020.

Fortalecer los protocolos de las rutinas de limpieza y desinfección de los productos a la hora de recibirlos de los proveedores, también en las bodegas, estantes, cuartos fríos.

Según las autoridades de salud, estos protocolos son de estricto cumplimiento, de lo contrario podrían ser cerradas y sancionadas si se presenta un masivo brote del Covid-19.