“La abstención alimenta la corrupción”, comentó uno de los consultados.

Villavicencio día a día consultó varias opiniones sobre las razones de la alta abstención en las elecciones de Congreso que osciló entre el 52 y el 54 por ciento. Eso significa que menos de la mitad escogió por la otra mitad que prefirió no participar.

El catedrático Hugo Velásquez atribuyó el fenómeno a la ausencia de cultura política, la falta de opinión pública y la pobreza en materia de pedagogía electoral.

“Hay una subcultura que encuentra en las elecciones un modus vivendi, una oportunidad de ingresos cada dos años. Esa es una oferta de esclavitud electoral. A eso hay que sumarle la falta de confianza en las instituciones y en el sistema electoral. Hay la convicción de que solo se pueden ganar las elecciones con dinero y con maquinaria política. Muchos perciben este sistema como una burla a sus derechos y por eso se quedan en sus casas”. Afirmó el excongresista Velásquez.

El politólogo Gonzalo Agudelo respondió: “Yo creo que básicamente es por la apatía por la corrupción que representa el Congreso”.

A su turno el sicólogo Nilson Arana comentó que “los que votaron por candidatos que ningún recurso público usamos para nuestras campañas comprenden la importancia de la participación para la sociedad. Hay miles que por el contrario ignoran que su abstención alimenta la corrupción y la pobreza”.

Samira Beltrán, del Consejo Municipal de Juventud de Puerto López, considera que se ha perdido credibilidad en la supuesta democracia colombiana. “Muchas personas creen que con un voto nada cambia. Y es ahí donde se debería impulsar la participación de los ciudadanos porque es la posibilidad de generar un cambio”.