SUSCRIBETE

Pollo Olímpico le responde a Coviandes

La empresa acusada de ser causante de emergencia en Vía Bogotá – Villavicencio respondió

En su pronunciamiento, la empresa Pollo Olímpico aseguró que Coviandes busca culpables donde no los hay.

Tras las recientes declaraciones de Alberto Mariño, Gerente de Coviandes, concesionario de la Vía Bogotá – Villavicencio, en las que aseguró que los constantes derrumbes que se presentan en el corredor vial en km 58, calificado por la misma concesión como el sitio más crítico de la vía, se debe a los galpones que hay en la parte superior de esa montaña, los cuales según estudios e información de Coviandes, estarían generando filtraciones de agua a la misma.

Ante el escenario la empresa dueña de dichos galpones, Pollo Olímpico a través de su gerente Nicolás Vásquez aseguró que lo que dice Coviandes “es falso completamente, la operación de los galpones que hay en ese sitio, en esa meseta arriba de la montaña donde ellos han hechos los túneles, no genera vertimiento alguno” añadiendo que el único líquido que se utiliza es el agua que beben las aves.

También dentro de su defensa Pollo Olímpico, aseguró que cuenta con todos los permisos ambientales y de ley que se le exigen y que tienen estudios de Corporinoquía que respaldan sus argumentos, en los que asegura que no hay desperdicios de líquidos que puedan afectar el comportamiento de la meseta donde se ubica el kilómetro 58.

La gerencia de Pollo Olímpico, también aseguró que Coviandes no es totalmente transparente cuando manifiesta que para la apertura del túnel que está construyendo en ese punto de la vía, no ha utilizado explosivos de fuerte impacto, considerando que aunque podría ser correcto que no se ha utilizado dinamita, se utilizaron otros explosivos que alertaron hasta las comunidades cercanas y que podrían haber afectado la montaña.

Finalmente, la empresa dueña de los galpones, manifestó que llegará hasta las últimas consecuencias con Coviandes, para demostrar que le quieren adjudicar culpas que no le corresponde, añadiendo que el concesionario “busca culpables donde no los hay”.