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Willian Aljure, un congresista atípico

Confía en que Mapiripán, donde vivía antes de ser elegido representante a la Cámara por las curules de paz, tenga por fin su carretera de acceso.

 

El representante a la Cámara Willian Aljure, quien antes de ser congresista vivía en Mapiripán, dijo que lo más urgente para ese municipio es la carretera de acceso.

Confió en que desde el Congreso pueda ayudar a que esa necesidad se vuelva realidad, pero aclaró que “No podemos ventilar nada hasta que se concrete, no soy de los que prometen. El día que haya, lo anunciamos”.

Aljure sigue ingresando al recinto de la democracia, en Bogotá, con su vestimenta tradicional. “Yo ando con mi cuchillo a la cintura, mi poncho, mis cotizas, mi sobrero. La cultura llanera es muchas veces andar descalzo y en el Congreso a veces ando descalzo. Para los campesinos es muy normal”, explica.

Aparte de la carretera de acceso a Mapiripán, el representante del sur del Meta cree que lo más grande que podría lograr durante su permanencia en el Congreso es la doble calzada tramo 1 de la vía Bogotá-Villavicencio.

“Eso sería muy importante si se llega a concretar porque beneficia no solo al Meta sino a Casanare y Guaviare. Se ha hecho un trabajo con varios representantes de la región apuntándole a esa obra”, dijo.

No está seguro de que quiera hacer carrera política. “Si le digo que me gusta la política, sería mentiroso”.

Aljure acompañó al alcalde Felipe Harman a un acto oficial en el Parque del Agua, entre los barrios Santa Elena y Paraíso, donde vivía cuando asesinaron a sus padres. Le agradeció al alcalde por el anuncio de instalar un CAI de la Policía en ese parque.